Parece completamente lógico, si entendemos la vida como "un conjunto de reacciones químicas muy complejas" que puede darse bajo ciertas circunstancias.
En mis años de universitario escuché sobre la famosa ecuación de Drake:
(Ecuación de Drake. Fuente: Wikipedia)
Todo esto suena bastante razonable... ¡Hey! Hay millones de sistemas solares allá afuera, ¿cómo no va a ser posible que en un par de ellos se haya desarrollado la vida?
Todo esto tiene bastante lógica siempre y cuando la vida no sea más que "un conjunto de reacciones químicas muy complejas", que se produzca por "azar" cuando se dan "las condiciones adecuadas". Dicho de otro modo: Tome un poco de agua, carbono, nitrógeno y una pizca de hierro, fósforo y otros elementos de la tabla periódica. Ponga en un planeta a fuego suave, ni muy lejos, ni muy cerca de su estrella madre para que no se queme. Espere un par de millones de años y tendrá su civilización galáctica.
¡Suena simple!
Pero la realidad siempre supera a la ficción. A medida que más se investiga la vida, más estadísticamente imposible se vuelve que ésta haya surgido por mero azar.
El siguiente documental muestra sólo uno de los pocos aspectos que permiten nuestra subsistencia (sin explicar nuestro origen, que esa es harina de otro costal), relacionado íntimamente no sólo con la temperatura de nuestro planeta, sino en factores aparentemente no relevantes, como el tamaño, masa y distancia de la luna que regula ciclos vitales y ha hecho posible ¡descubrimientos científicos!
No tengo más que agregar, por favor, mira, analiza, y disfruta este documental. ¡Vas a quedar maravillado!
Actualización: Resulta que también somos especialmente afortunados de poder contemplar fenómenos que en un universo con miles de millones de años simplemente no debieran estar ocurriendo. Un interesante artículo de Santiago Escuain se puede leer en su blog acá.
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